Pilares Espirituales

Pilares Espirituales

En nuestro proyecto educativo una de las áreas centrales y fundamentales es el Área Espiritual.

El área espiritual tiene como objetivo principal experimentar y vivir los valores cristianos, que nos invitan a seguir fielmente al Señor Jesús y a la Virgen María, actuando con coherencia a la luz del Evangelio; iluminados e inspirados por la oración, la vocación y el servicio a los demás. Sabiendo que somos Instrumentos de paz y amor al prójimo.

Nuestra Misión es vivir fraternalmente como comunidad cristiana, acompañando con solidaridad al que necesita y dando testimonio de nuestra fe católica.

Nuestra Área Espiritual se sustenta en 4 pilares fundamentales que nos ayudan a vivir plenamente la espiritualidad en nuestra comunidad. Estos pilares son:  Oración – Misión – Servicio- Testimonio.

Oración: Es una experiencia individual y comunitaria de fe, un diálogo sencillo y profundo que permite estar en sintonía con Dios y en armonía con uno mismo, que transforma en una persona orante, que alaba, que escucha en silencio, que contagia la Fe e impulsa al servicio.

Servicio: Es una vivencia que surge de la oración personal y comunitaria, donde el Espíritu Santo actúa en la persona orante, transformando su Fe en obras, con desprendimiento, corazón dispuesto y con amor al prójimo.

Misión: Extender el Reino de Dios en el presente, llevados por el Espíritu Santo, convirtiéndonos a cada uno en Cristo vivo para entregarnos a la labor transformadora de amor, misericordia, verdad, paz y justicia en la comunidad. Escuchando de corazón a corazón las necesidades, alegrías y esperanzas del prójimo; estamos atentos para facilitar el diálogo fraterno.

Testimonio: A imitación de María con sencillez, humildad, templanza, sinceridad y autenticidad se vive el ser discípulos en comunidad, siendo portadores y proclamadores de la Buena Nueva entre los hermanos. 

La Espiritualidad es el pilar fundamental del colegio. Se espera que los niños la vivan en toda situación de aprendizaje a la que estén expuestos en su camino de formación. La Comunidad educativa está llamada a vivir como hijos de Dios y para esto realizamos un trabajo pastoral conjunto, desarrollando valores y virtudes, viviendo la experiencia de la fe, para ser testigos fieles de Jesucristo junto a la compañía de nuestra Madre María.